García Lorca, La Rambla

«La rosa mudable, encerrada en la melancolía del carmen granadino,
ha querido agitarse en su rama al borde del estanque
para que la vean las flores de la calle más alegre del mundo,
la calle donde viven juntas a la vez las cuatro estaciones del año,
la única calle de la Tierra que yo desearía que no se acabara nunca,
rica en sonidos, abundante de brisas, hermosa de encuentros,
antigua de sangre: La Rambla de Barcelona.»

Al manifestar la gente de Barcelona y del mundo su rechazo de los crueles atentados del pasado día 17, vino a la memoria y se recitaron las bellas palabras de Federico dedicadas a la Rambla de las flores y a sus floristas: rosas blancas, rojas y amarillas para todos, homenaje a las víctimas, clamor por la Paz.

El texto de Lorca y la vieja fotografía evocarán aquí su visita en 1935 por el estreno en Barcelona de «Doña Rosita la soltera o el lenguaje de las flores».

El 18 de agosto de 1936, a las cinco de la mañana, el poeta Federico García Lorca fue fusilado en Granada por el bando rebelde español junto a dos anarquistas y un maestro.

P A Z