Para el mes de mayo puse en mi Calendario la foto que llamo «Los niños deciden». Leemos en su Declaración de derechos:
«El niño tiene derecho a recibir una educación que le permita desarrollar sus aptitudes y su juicio individual, su sentido de responsabilidad moral y social, llegar a ser un miembro útil de la sociedad.»
Conocerán la anécdota del niño que iba a rezar todos los días a la misma hora a una Iglesia. El sacerdote, viendo que el niño venía cada día y pasaba algunos minutos arrodillado delante del Santo Sacramento, le preguntó un día: “¿Qué le pide a Dios todos los días? ¿Cuál es su problema? A lo que el niño respondió: “No le pido nada. No tengo grandes problemas. Lo único que le pregunto a Dios es en qué le puedo ayudar”.