«Jesús dijo: Dejen que los niños se acerquen a mí. Si no reciben el Reino de Dios como un niño, no entrarán en él», san Mateo c.19.
¿En qué puede un niño ser ejemplo a imitar por nosotros? ¿Será posible ‘nacer de nuevo’?
· · El niño es alegre y soñador, crédulo de historias fantásticas.
· · Con muchas preguntas, algunas de difícil respuesta.
· · El niño se ve dependiente, necesitado, frágil e inseguro.
· · Vive mal la soledad y la oscuridad.
· · El niño adora e imita a sus padres, y a sus héroes.
· · Gusta el cariño y buenas palabras, teme castigos y abandonos
· · Todo lo espera de los que ama, feliz con regalos y sorpresas.
Será verdad. Para creer en Dios como padre bueno y en Jesucristo como señor y amigo nuestro, para creer en el cielo y en el triunfo del amor, habremos de recuperar el niño frágil y soñador que llevamos dentro.
__
Conocerán unos versos de Miguel de Unamuno que fueron súplica por una ‘infancia espiritual’, pensando así al fin encontrar a Dios. Parece que cuando Unamuno murió, alguien encontró cerca esta oración:
Agranda la puerta, Padre,
porque no puedo pasar.
La hiciste para los niños,
y yo he crecido a mi pesar.
Si no me agrandas la puerta,
achícame por piedad;
vuélveme a la edad bendita
en que vivir es soñar.
__
Imagen: El principito, Antoine de Saint-Exupéry, se explicó así:
– Algunos ven las cosas como son y dicen ¿por qué?
– Yo sueño con cosas que nunca fueron y digo ¿por qué no?
Por actualizar, vean el escrito para Navidad 2022, Dios se hizo niño, «La infancia de Dios».